Si hay algo cierto en esta vida y, salvo casos excepcionales, es que tenemos que trabajar. Sea que lo hagamos en algo que nos gusta, o quizás no tanto, el trabajo suele generarnos estrés, cansancio y hasta cierto punto de hartazgo.
La buena noticia, es que hoy en día se han desarrollado ciertas herramientas, así como formas de encarar el trabajo, que lo hacen más llevadero. Ahora bien, sea cual sea el caso, hay una palabra que es clave: “MOTIVACIÓN”. Cuando una persona está motivada y, está demostrado científicamente, el tiempo transcurre de manera más agradable, la productividad y rendimiento aumenta y, el humor de las personas es mucho mejor.
¿Existe algún secreto para sentirnos motivado en el trabajo? Si estoy pasando por un momento de mucho desánimo y desmotivación, ¿puedo revertir esa situación? La respuesta es absolutamente “SI”.
Cómo estar y mantenernos motivados
Veamos 5 puntos clave y decisivos para mantenernos motivados:
- Conocer con precisión que se espera de nosotros
Más allá de que seamos nuevos o no, muchas veces no tenemos del todo claro, que es lo que nuestro jefe o empresa espera de nosotros. Parece trivial, pero no lo es. Supongamos que trabajamos como recepcionistas en una empresa: o sea que debemos atender el teléfono, recibir a los clientes, pero quizás haya otras tareas no tan “inmediatas” que también debamos o podamos hacer. Por ejemplo, llevar un listado de las llamadas que hemos recibido y cuales han sido las principales razones de esos llamados. Si hay algo que no está claro y, por pequeño que parezca, anímate a preguntar a tus responsables. De esta forma evitarás observaciones, lo que siempre desmotiva.
- Potencia las tareas con tus habilidades
¿A qué nos referimos? Todos tenemos habilidades y competencias más desarrolladas que otras. Haz foco en tus virtudes y, sácales el mayor jugo posible. Si tú sabes que eres detallista por ejemplo entonces capitaliza esta virtud, en buenos registros, por ejemplo.
- Anímate a proponer
Naturalmente que nuestro jefe pautará nuestro trabajo e indicará cuáles son nuestras responsabilidades. Sin embargo, tu puedes proponer cambios al momento de realizar una tarea, para que esta sea más efectiva. También puedes sugerir hacer algo más por encima de lo estrictamente necesario. Esta actitud siempre es de gran agrado para quien lidera un equipo de trabajo y, alimenta un buen vínculo laboral. Si una determinada idea es rechazada, no te desanimes, redobla la apuesta con otra idea. Llegará el momento en que algo de lo que has propuesto se implemente y eso te gratificará enormemente.
- Define yestablece objetivos
Además de ser casi una “ley” en el mercado laboral y financiero, tener objetivos es la gran zanahoria por la que caminamos más y mejor. Las metas y los objetivos ayudan, entre otras cosas, para guíar nuestros pasos. Tener una meta, trazar un plan para lograrla y, finalmente alcanzarla es uno de los sentimientos más gratificantes para el ser humano. Si en el camino encontramos obstáculos, como la rutina, un bajo salario, el superar eso y alcanzar nuestro objetivo nos hará sentirnos muy capaces.
Una vez que hemos alcanzado con éxito una meta, definiremos otra o daremos un paso más adelante. Eso será una razón más que suficiente para levantarnos con ganas e ir a trabajar. También notarás que el tiempo en el lugar de trabajo, pasará más de prisa. Tu estarás concentrado en cumplir con tu plan y, no viendo el reloj constantemente.
- Sé ordenado y metódico
Algo que suele estresar bastante y, que termina desmotivando, es tratar de definir cada día que hacer y por dónde empezar. El trabajo debe ser un hábito, que es necesario pero que además nos da placer. O por lo menos, no debiéramos estar pensando cómo trabajar lo menos posible.
Si llego a la oficina, por ejemplo, y encuentro que mi escritorio está desbordado de papeles y ni siquiera tengo una agenda, entonces es muy probable que me frustre. Llegar a un lugar ordenado y, que, de manera casi automática, sepa lo que tengo que hacer, es sorprendentemente satisfactorio.
Si estás pasando por un mal momento laboral, te proponemos que pongas en práctica estos consejos y veas lo que ocurre al cabo de unos días. Todos pasamos por momentos malos, pero la buena noticia es que siempre sale el sol. Y que nuestros días estén iluminados y con energía positiva, depende mucho de nuestra parte.
Autora: Marisa Peris