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Como usar correctamente las tarjetas de crédito y no caer en tentaciones

Es innegable la imposición de las tarjetas de crédito como medio de compra. Desde las tiendas online que cada día son más, hasta las instituciones financieras que promueven el uso del plástico.

La tarjeta de crédito tiene muchas ventajas y, que explican su uso masivo, pero también pueden convertirse en nuestra peor pesadilla si no sabemos usarla.

Muchas veces subestimamos el uso de estos casi “mágicos” plásticos, pero lo cierto es que son muchos los dolores de cabeza que pueden causarnos.

Veamos qué podemos hacer para que eso no pase y, cómo podemos evitar caer en fraudes.

Cómo usar apropiadamente la tarjeta de crédito

Algunos consejos que pueden ayudarnos:

Salir con objetivos claros de compra

Está probado que, si salimos con una tarjeta de crédito en nuestra cartera y, sin saber que vamos a comprar, seguro compraremos más de lo que debemos. También probablemente compremos cosas que realmente no necesitamos.

A todos nos gusta de vez en cuando salir a pasear por los centros comerciales, pero una cosa es pasear y otra es entrar a cuanto negocio nos guste. Prioriza los lugares que venden aquello que necesitas y, trata de dejar de lado los que venden cosas costosas que no sueles usar. Es una tentación en la que puedes caer fácilmente.

Define tu cuáles son los límites de tu crédito

Generalmente y, después de cierto tiempo, la entidad financiera que emite tu tarjeta te amplia el límite de crédito. Muchas veces esto lo hacen sin previa consulta, para que precisamente gastes más de lo pensado. Pregúntate si realmente tiene sentido, por ejemplo, tener un límite de 3000 dólares si lo máximo que puedes pagar es 500.

Evita los planes de cuotas muy extensas

En muchos sitios, las compras con tarjeta son financiadas en varias cuotas y sin interés. Algo que te cuesta 600 y lo puedes financiar hasta en 6 cuotas, por ejemplo, te significa 100 por mes. Esto puede parecerte poco y, entonces ¿por qué no comprarse algo más y darse un gusto? El problema es que luego esa pequeña cuota se juntará con otras. Puede llegar un momento en el que no puedas pagar el total de tu tarjeta y recurras a la financiación. Si esto pasa, los intereses son muy altos y cada vez será más difícil que te pongas al día.

Evita pagar el monto mínimo mensual

Cuando nos llega el estado de cuenta, vemos dos importes: el total de la tarjeta de ese mes y, el pago mínimo aceptable. Si pagas el mínimo entonces los recargos serán mucho más altos que si pagas, aunque sea un poquito más que el mínimo. Todo está pensado para que sigas usando la tarjeta, pero con el tiempo, si pagas el monto mínimo la cuenta irá aumentando. Y lo peor de todo es que esa cuenta aumentará sin haber hecho compras.

Piensa antes de adjudicar adicionales o extensiones

Sea que tengamos hijos adolescentes o algún otro familiar que no puede tener tarjeta, tenemos que ser muy cuidadosos con dar extensiones. Nunca olvidemos que nosotros seguimos siendo los verdaderos responsables del cumplimiento de pago.

Como consejo y, si tenemos que dar una extensión, es que esta no supere más de la mitad del límite de crédito. Si por algún motivo, la persona a quien le diste una extensión no sabe manejarse o no paga la tarjeta, tu tendrás que responder ante esa situación.

Las tarjetas de crédito son muy útiles y pueden ser de gran ayuda en la medida que las sepamos usar. Pensemos que todo está pensado para promover un mayor consumismo y, las tentaciones están a la vuelta de la esquina. La solución no es esconderse y negarse a usarlas, sino hacerlo con responsabilidad.

Por: Maria Peris

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Joan Ferreira, Blog Finanzas

Financista, asesor financiero, consultor de pequeñas empresas, empresario, inversionista, maestro, voluntario, corredor, viajador, y muy familiar. Muchos consideran que se mucho de muchas cosas, pero lo unico que yo se es que me falta mucho por aprender.

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